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Aritz Aduriz lucha por un balón aéreo en el choque de Champions contra el Nápoles.
Obligados a hacer cumbre en agosto
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Obligados a hacer cumbre en agosto

El Athletic debe pulir sus últimas pruebas y solventar sus objetivos prioritarios en el primer mes de competición, algo que le pasó factura el pasado curso

elcorreo.com

Miércoles, 22 de julio 2015, 22:02

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Resulta extraño en el fútbol que un equipo deba resolver sus objetivos prioritarios en el primer mes de competición, cuando todavía restan nueve de imparable trajín para finalizar la temporada. Algo así le sucedió al Athletic el pasado curso, cuando tuvo que refrendar en 180 minutos contra el Nápoles toda una brillante campaña que le condujo a la cuarta plaza de la clasificación. El equipo de Ernesto Valverde se jugaba en agosto regresar a la fase de grupos de la máxima competición continental, un hito poco frecuente en el club rojiblanco, y este curso le sucederá algo similar. Deberá sellar su pasaporte para competir en la Europa League y disputará ante el Barça la Supercopa de España, el primer título del curso.

Al Athletic le pasó factura el hecho de alcanzar el pico óptimo de forma para las primeras semanas de competición. La acumulación de encuentros en la fase inicial del calendario y el lógico desgaste mental hicieron mella en la plantilla rojiblanca, que se desinfló de manera alarmante en la Liga y en la fase de grupos de la Champions, donde partió como uno de los principales favoritos para pasar a la ronda de eliminación directa. Esta vez, el Athletic comenzará a competir en julio (el día 30), casi un mes antes que sus adversarios de la Liga, y deberá hacerlo además con plenas garantías, ya que, a pesar de su teórica superioridad sobre el Inter Baku y el Hafnarfjordur, el equipo no está todavía del todo formado y los errores pueden ser definitivos.

A ese favoritismo relativo se refirió ayer Aritz Aduriz, uno de los estandartes de los rojiblancos la temporada pasada. "El año pasado, con la previa, no empezamos bien la liga y nos penalizó durante el año", reconoció ayer el ariete en sala de prensa. En este sentido, el guipuzcoano confía en que la tropa de Valverde, que llega diezmada al encuentro de ida -cinco titulares están lesionados-, se reponga de un inicio tan cargado, con tres partidos contra el Barcelona en apenas nueve días.

"Afrontamos el calendario con la máxima ilusión, es un comienzo difícil pero tenemos que jugar contra todos", dijo el delantero, consciente de los riesgos de disputar un encuentro decisivo como el del próximo jueves en una fecha tan temprana. "No me gusta hablar de favoritismo, todos los equipo son competitivos y pueden eliminarte", sentenció Aduriz. Durante su primer mes de competición oficial, el Athletic deberá solventar dos previas europeas para meterse en la fase de grupos de la Europa League, luchar por un título y sortear la primera jornada de Liga contra el Barça. Un gran arranque serviría de rampa de lanzamiento para los rojiblancos. Cualquier tropiezo, casi un inicio dramático. De nuevo, el Athletic se encuentra obligado a hacer cumbre en agosto.

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