El regreso del Athletic a la competición y del público a San Mamés sin restricciones terminó con victoria de los rojiblancos y una gran fiesta en las gradas. Es decir, de la mejor manera posible. El equipo de Marcelino mereció los tres puntos ante un Villarreal que dejó detalles de su calidad indiscutible pero no alcanzó a aguantar el pulso
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión