Paso de gigante del filial

El partido comenzó de la mejor manera posible. Con ese gol de Juan Artola. Lo logró de cabeza, gracias a un centro medido de Núñez. El getxotarra acumuló el sexto tanto del curso. A partir de ahí, el conjunto riojano se estiró en busca del empate, pero Malcom, Diarra y Luis Bilbao buscaban las cosquillas del arquero visitante, Víctor Vidal. De esta manera, se reclamó una mano dentro del área riojana que el colegiado pasó por alto.

El Bilbao Athletic se desenvolvía mejor, tocando. Además, resultó incisivo en las marcas, con Prados a los mandos. El centrocampista aportó velocidad al juego para agotar al veterano conjunto de Raúl Llona, que apenas se asomaba al balcón del área con un remate mordido de Calderón, que acababa en las manos de Agirrezabala, y un chut de Emilio Lozano cerca del palo. Paredes y Sillero sujetaban bien al ariete vitoriano Jon Ander Pérez. El filial buscó el segundo tanto con jugadas trenzadas, con sociedades formadas en los costados por Chasco y Luis Bilbao, y Núñez con Malcom. De esta manera, se produjo un cabezazo de Artola a la media hora.

Poco después, el lateral vizcaíno Sergio Cubero puso a prueba los reflejos de Agirrezabala con un lanzamiento potente de falta. La respuesta local llevó la firma de Núñez, muy activo durante todo el partido.

En el segundo acto, Aitor Paredes reclamó otro penalti por posible empujón en un salto de cabeza. El filial perdonó, más tarde, en una acción entre Núñez y Artola en el que el delantero, con todo a su favor, no acertó para anotar el segundo de la matinal de Lezama por la intervención prodigiosa de Vidal. Tampoco Luis Bilbao en un centro cruzado que casi caza Artola en boca de gol. El filial había hecho méritos para anotar más dianas, para sentenciar, pero ese segundo tanto no llegaba. De ahí que hubiera incertidumbre en Lezama.

En el minuto 66, el colegiado expulsó por doble amarilla a Prados, que encima se marchaba lesionado. Esta situación dejaba a los cachorros en inferioridad con muchos minutos por delante para administrar la exigua renta. Salinas introdujo a Goti y a Rincón para ajustar su formación, con Núñez pasando al lateral izquierdo. La SD Logroñés se lanzaba al ataque en superioridad, no le valía el resultado. No obstante, el equipo rojiblanco supo sufrir, aguantar los nervios finales y defenderse con orden pese al esfuerzo anterior. Resistió con empaque los siete minutos de prolongación y atajaba gran parte de la salvación.

Ahora mismo, a la espera de lo que ocurra con el recurso presentado por el Deportivo por presunta alineación indebida, el Bilbao Athletic se sitúa cinco puntos por encima del descenso, con cinco jornadas por disputarse.