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jon navascués
Viernes, 29 de abril 2016, 23:39
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El Bilbao Athletic disputa este lunes su anteúltimo partido en San Mamés de la temporada. El filial recibe al líder de la categoría, el Leganés, con la permanencia a 11 puntos en una semana en la que, además, el equipo ha vivido otro revés, «una desgracia» ya conocida. Aitor Seguín sufrió una lesión en el ligamento cruzado de la rodilla derecha en una acción fortuita durante la sesión de recuperación del pasado martes. Eso significa quirófano. Y la posterior incertidumbre, un mínimo se seis meses para volver a calzarse las botas. «El palo ha sido muy gordo para todos, un pequeño desastre para el club y para él. El primer día Aitor estaba muy afectado, pero cada está día mejor. Poco a poco», valoraba ayer José Ángel Cuco Ziganda en Lezama.
Es la cuarta lesión del mismo tipo que padece el equipo en dos años. Iru, Magdaleno, Undabarrena y ahora el extremo. «Queremos pensar que es casualidad. Eso no significa que no le demos vueltas a los descansos, las recuperaciones, las botas, el césped, la exigencia, las pocas vacaciones que hayamos podido tener Sinceramente, pienso que es casualidad», manifestó Ziganda.
Además de la ausencia de Seguín, el técnico lamenta no tener «delanteros en número», porque Villalibre no llega y Guarrotxena, según dijo, «a ver cómo está». Y tampoco Córdoba parece estar en condiciones. Se da la paradoja de que Guillermo, cedido al Leganés, tampoco podrá jugar en San Mamés por la cláusula del miedo.
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